viernes, 13 de mayo de 2011


El Defensor, un sorprendente drama judicial que peca de entretenido



Generalmente cuando en una película lo que resalta más, es el nombre de un actor popular, tiende a formarse una idea errónea del producto en sí. Anne Hathaway pasó de ser una actriz encasillada en las comedias románticas, a ser una de las nominadas en los Oscar, quitándose la etiqueta de la boba de las cintas girly. Y el mejor ejemplo, Leonardo Dicaprio, encasillado a morir como el mítico Jack de Titanic, ahora eso ya ha quedado atrás. Matthew McConaughey, es el protagonista de El defensor y les adelanto, creo que está por quitarse una etiqueta. 

Mickey Haller es un abogado que se ha especializado en defender a criminales de poca monta procedentes de los barrios bajos. Cuando un día se le presenta la oportunidad de defender a Louis Roulet, un rico heredero detenido por el intento de asesinato de una prostituta, su carrera da un vuelco, pues esto significa percibir unos ingresos muy superiores a los habituales. Sin embargo, aunque el caso es aparentemente sencillo, acabará por tener consecuencias inesperadas. 

Así como David Fincher, impregnó a la Red social con los temas comunes de una cinta clásica, El defensor tiene un aire clasista de películas que se centran en mostrar la “naturaleza” de personajes normales, en este caso el cliché del abogado corrupto. Aún así la historia resulta emocionante y redonda desde su inicio. Alboroto, mentiras, corrupción y revelaciones inesperadas, tópicos que funcionan de una manera fluida, teniendo como consecuencia giros narrativos concretos, sin verse forzados. 

El señor McConaughey, encarna al prepotente abogado, que desde hace unos años el musculoso no dejaba quitarse la camiseta para marcar, demuestra tener mucho más que ofrecer a nivel interpretativo y se funde en un papel carismático y duro, muy prudente su actuación. Un reparto de lujo respalda a Matthew, Marisa Tomei, Ryan Phillippe, y el veterano de William H. Macy, todos con acertados papeles. 

La dirección es correcta, ya que a una cinta de esta manufactura no se le puede pedir un gran jugueteo de cámara, la estructura se limita a los planos base, sin embargo, la fotografía logra darle un toque de originalidad al crear la atmósfera del medio en que se desenvuelve el protagonista. Brad Furman, el director, crea una historia ágil por medio de flashbacks para sacarnos de la rutinaria forma de contar los hechos por medio de palabras, dotando a la historia y al espectador la opción de comparar las versiones de los involucrados. 

El defensor, es drama judicial que dista mucho de ser aburrida como se puede llegar a pensar, llegando a ser más entretenida que muchos de los blockbuster que se encuentran en cartelera.

Diego S.

No hay comentarios:

Publicar un comentario