En la época en la que la industria del cine carece de ideas nuevas, su nueva estrategia, aparte de los remakes, es acudir a las series de televisión que gozaron de gran éxito. No esperaba que Tim Burton quien es su momento nos diera obras como, El Joven Manos de Tijeras, Ed Wood y El Gran Pez, optara por hacer una adaptación a una historia, que si bien podría ser una historia que encaja en el universo de Burton, me pareció más un capricho de él por rendirle homenaje a la serie que disfrutó en su adolescencia. Con Sombras Tenebrosas realmente da “miedo” –léase con sarcasmo--.
En 1752, los Collins y su hijo Barnabas zarpan de Liverpool con destino a América para librarse de la misteriosa maldición que pesa sobre su familia. Con el paso de los años, Barnabas (Johnny Depp), un playboy impenitente, se convierte en un hombre rico y poderoso que comete el error de romperle el corazón a Angelique Bouchard (Eva Green). Pero ella, que es una bruja, lo condena a un destino peor que la muerte: lo convierte en vampiro y lo entierra vivo. Dos siglos después, en 1972, Barnabas consigue salir de su tumba y se encuentra con un mundo irreconocible. Adaptación de la serie de televisión creada por Dan Curtis en 1966, que tuvo un remake en 1991.
Así como le pasara a Sir Woody Allen en los años noventa, Tim Burton se ha visto estancado creativamente desde la que considero su último buen trabajo, El Gran Pez, de ahí en fuera ha ido en picada, pero al parecer su maldición ha sido la horripilante Alicia. Retomando Sombras Tenebrosas, es un ‘abarcar mucho y apretar poco’, para empezar, el hecho de resumir la esencia de una serie que tuvo más de cien episodios suena casi imposible, el meter muchos personajes y divagar superficialmente en sus historias resulta perjudicial para una cinta de dos horas.
Dark Shadows lejos de ser tenebrosa, no podría resultar más convencional. Es una supuesta comedia de terror en la que el terror hace reír y la comedia da miedo, para ser sincero, estoy siendo generoso. Al estar ambientada en los 70’s, el diseño de producción ansía meter suficientes referencias de la década para evocar aquella época --tanto sonoras como visuales--, pero en cambio, es tal el abuso --y el mal uso--de estas referencias, que la traslación queda carente de credibilidad. Aun así, Burton se ha caracterizado por tener buen vestuario y una estética impecable, aquí no es la excepción.
Eva Green es quien resalta --dado que el protagonista y el resto del reparto son planos—gracias a su rol de la villana de la historia, casi por default, ya que es quien hace lo más destacable de la película. El por siempre amanerado/cómico/sarcástico/estancado Deep es más de lo mismo, ¿Será el actor más espantoso de la década junto con la chica crepúsculo? Creo que cada uno es su equivalente.
La adaptación de Dark Shadows llega tras las de Charlie y la Fábrica de Chocolate, Sweeney Todd y Alicia, que constatan la pereza y desidia de su director para enfrentarse a nuevos retos. Tim Burton ha pasado de filmar cuentos perturbadores, y ciertamente rebeldes, a seguir de manera complaciente a la industria, la misma que lo ha llevado hasta el punto de adaptarse a sí mismo --¿Alguien dijo Frankenweenie?--. Nada nuevo en el horizonte, aunque siempre nos quedará una duda, ¿La relación de Deep y Burton no es más que un amor frustrado por Bonham Carter? Digo, para que sigan trabajando juntos con tan malos resultados, es extraño, la dupla ya dio lo que tenía quedar.
P.D. Es curioso que lo único que me hizo reír fue la abuelita que no tiene un sólo diálogo y sólo aparece 5 min.
Diego S.
Un detalle: la historia fue comprada por Johnny Depp y este convenció a Tim Burton de hacerla.
ResponderEliminarOpino igual en unas cosas pero en otras no, pero si estoy de acuerdo que està cinta parece màs de otra persona que de TIM BURTON el que sorprendia y no el que está nadando de muertito.